César Chacón: la historia detrás de la etiqueta

  Creador de la mitad de las más de 400 etiquetas de vino mexicano que hay en en el mercado, César Chacón le dio un rostro y una personalidad sofisticada, fresca y contemporánea a la industria del vino mexicano. Entrevistamos al maestro Chacón en su atelier en Ensenada, desde donde fue una pieza fundamental de la identidad visual del vino mexicano.

 

Por Erick Falcón | Todos Santos

 

cesar
Foto: E. Botello

Al descorchar una botella, liberamos el espíritu de su creador y los aromas de la paciencia, esfuerzo y pasión que lleva su ADN. Y la misión de César Chacón durante los últimos 27 años fue la de
plasmar esa compleja historia en su mínima expresión posible: su etiqueta.

Para Chacón, el diseñador más prolífico de la industria del vino mexicano, toda etiqueta debe desnudar la historia del vino y su creador en forma abstracta, elegante y balanceada. Para ayudar a ‘pintar’ esa historia, no falta nunca su bolígrafo Keuffel & Esser, del que emanan docenas y hasta cientos de bocetos que han de ayudar a transmitir el carácter de un vino mexicano a través de su diseño de etiqueta.

cesar draw    “Alguien dijo que el vino es poesía embotellada, entonces yo digo que la etiqueta es el rostro del poeta. Mi diseño es purista, y no hay nada que no se necesite.”

Egresado de la Universidad Iberoamericana en 1984, Chacón ingresó al mundo del vino por mera casualidad. En una feria de servicios en Ensenada conoció al Dr. Antonio Badán, pionero del vino mexicano, quien le pidió un diseño para la etiqueta de su ahora legendario vino Mogor Badán de la cosecha de 1987.

“Fue mi primer etiqueta, y es todavía la imagen de ese vino. El doctor Badán me invitó a desayunar a su rancho El Mogor, y me presentó a un Hugo D’Acosta recién llegado a Bodegas de Santo Tomás. Hugo se interesó y me pidió hiciese etiquetas para Santo Tomás, y pues el resto ahora es esta historia.”

Entre 1990 y 2004, Chacón continuó trabajando ocasionalmente en varios proyectos de etiquetas (incluyendo el vino de su boda en 1991, un tinto de Cavas Valmar).  En 2005 decidió dedicar todos sus esfuerzos al diseño gráfico enológico, y a la fecha ha sido el creador de 200 de las poco más de 400 etiquetas de vino mexicano que hay hoy en día, además de la imagen oficial de los eventos de las Fiestas de la Vendimia en Ensenada durante nueve años seguidos.

“Entre más conozco sobre el origen del vino, más argumentos hay para diseñar, hay que conocer bien la propuesta enológica del creador, su intención y a quién está dirigido el vino, parar crear una imagen con personalidad propia.”

Con un estilo propio que trascendió ante generaciones posteriores en el rubro del diseño gráfico, César definió la identidad visual de muchos de los principales actores del vino mexicano, y hasta poco antes de su muerte continuaba involucrado con la industria en talleres y actividades privadas desde su taller en la Ciudad de México; el diseñador mexicano murió el 26 de julio de 2023 en la compañía de su esposa Leticia y su hija María F. Chacón, pero deja tras de sí un enorme legado para el vino mexicano, como uno de los pioneros del diseño gráfico enológico y del movimiento del vino mexicano.